Archivo de la etiqueta: Artrosis cervical

La artrosis cervical

La artrosis cervical es una enfermedad degenerativa que afecta a las cervicales. Debido al desgaste en las articulaciones y los huesos de la columna vertebral, especialmente alrededor del cuello, provoca un dolor crónico en quienes sufren de este problema.

Así pues uno de los principales factores de riesgo es la edad. Puede empezar a partir de los 25 años con una evolución lenta y sin manifestaciones graves durante un largo periodo de tiempo (sólo el 30% de los pacientes tienen manifestaciones clínicas). Se estima que casi todos los hombres y las mujeres mostrarán signos de tener espondilosis cervical en las radiografías en el momento en que alcancen los 70.

También hay factores hereditarios que dan lugar a una mayor predisposición a la artrosis. Además, ciertas posiciones y posturas pueden dar lugar a ello por sus daños a la columna cervical. La mala postura, la obesidad y debilidad muscular cambian la estática de la columna aumentando la tensión en la zona. Todas estas alteraciones posturales deben corregirse para controlar el dolor cervical.

Es frecuente que el dolor cervical comience siendo una causa muscular y por ello aparece en personas que tienen que estar mucho tiempo en posiciones fijas con la cabeza. Antes era una enfermedad común en modistas que permanecían largos periodos de tiempo cosiendo. Hoy es más frecuente en las personas que realizan trabajos de oficina y con ordenadores.

Los síntomas de la artrosis cervical son: dolores de cabeza; debilidad muscular con sensación de adormecimiento en brazos, hombros, manos y dedos; hormigueos; pérdidas de fuerza y de equilibrio; dolor crónico en el cuello o rigidez con limitación en los movimientos del cuello.

Buscar una posición cómoda en el trabajo, teniendo la cabeza apoyada en una silla con respaldo alto, descansar periódicamente cambiando de postura, dormir con una almohada que permita una posición recta del cuello y realizar ejercicios y deportes como la natación, son consejos fáciles de seguir y al alcance de todos.

La aparición de una artrosis cervical no supone la suspensión de toda actividad, al contrario, es necesario realizar ejercicios diarios para fomentar el movimiento. Una persona nerviosa tardará más en recuperarse, ya que la tensión emocional favorece la contractura muscular en el cuello.

Alexis D. Vicente