Archivo por meses: julio 2013

Pilates, un método para la artrosis

La artrosis es la más común de las enfermedades articulares. Por desgracia aún no existe un tratamiento que acabe definitivamente con esta enfermedad. Por eso de momento vamos a hablar de un método que te ayudará a paliar el dolor y a reducir el engarrotamiento. El Pilates, por sus movimientos suaves y de bajo impacto, es uno de los recurso más utilizados para hacer frente a esta patología.

La artrosis afecta tanto a jóvenes como a ancianos, aunque es más frecuente en estos últimos. Se trata de una enfermedad que desgasta todos los cartílagos articulares, incidiendo sobre todo en aquellos que soportan más peso. Por eso, las manos, las rodillas, la cadera y la columna son los que más sufren. El Pilates, por sus movimientos suaves y de bajo impacto, es una buena forma de hacerle frente a esta patología.

Articulaciones afectadas por la artrosis

Articulaciones afectadas por la artrosis

Sus causas son desconocidas, o al menos no se conocen con certeza.  Algunos hablan de factores mecánicos, otros metabólicos y unos cuantos hereditarios y ambientales. Quizás por eso aún no existe un tratamiento específico ni curativo, aunque sí hay métodos paliativos para retrasar las deformaciones que podrían provocar la incapacidad.

Una de las claves para prevenir la aparición de la artrosis o reducir sus efectos es mantener la movilidad y la estabilidad de las diferentes articulaciones del cuerpo haciendo regularmente ejercicios de bajo o nulo impacto.

El Método Pilates reúne estas características y por eso es muy recomendable en estos casos. Con ejercicios para favorecer el movimiento articular, dando tono a los ligamentos y drenando la articulación es el mejor modo de lograr aliviar el dolor y mejorar la movilidad de la articulación afectada.

El Pilates es considerado una técnica de rehabilitación para aquellas personas que sufren artrosis por sus movimientos suaves realizados de forma muy controlada. Pero es muy importante que haya un profesional supervisando los ejercicios, ya que el riesgo de sufrir lesiones cuando se padece esta patología es mayor. Hay diversos ejercicios que se pueden aplicar a la artrosis, pero existe uno que es especialmente indicado para prevenir o retrasar su aparición en rodillas y caderas. Vamos a explicarte paso a paso como se realiza para que no tengas ningún problema al ponerte manos a la obra.

Pilates un método para artrosis

Pilates un método para artrosis

Primero sitúate tumbado hacia arriba con la espalda apoyada sobre la colchoneta y la columna manteniendo sus curvaturas naturales. Luego separa tus piernas a una distancia igual que la anchura de las caderas y flexiónalas poniendo los pies paralelos en la colchoneta. A continuación, extiende tus brazos y colócalos sobre la colchoneta a los lados del cuerpo con las palmas de las manos mirando hacia el suelo. Una vez te hayas posicionado de esta manera realiza un par de respiraciones soltando el peso de tu cuerpo hacia la colchoneta al exhalar.

Cuando consigas estar relajado, despega el pie derecho de la colchoneta manteniendo la rodilla flexionada hasta colocar la pierna en ángulo recto (la parte inferior tiene que estar paralela al suelo). Luego coloca tu pierna izquierda junto a la derecha en ángulo recto y cada mano sobre su rodilla correspondiente. No te olvides de mantener siempre los pies extendidos y la zona lumbar apoyada sobre la colchoneta.

Inspira y con ayuda de tus manos dibuja círculos con tus rodillas teniendo los pies estirados y sin separar. De nuevo la zona lumbar tienes que tenerla en contacto con la colchoneta. No dejes de inspirar y aleja las rodillas de tu cuerpo elevando ligeramente los pies (juntos y en punta). De este modo podrás movilizar tu cadera.

Por último, exhala cerrando el círculo y juntando tus rodillas mientras las aproximas ligeramente hacia el pecho, hundiendo tu ombligo en la colchoneta.

Realiza 3-5 repeticiones de este ejercicio y a continuación otras 3-5 repeticiones invirtiendo el sentido de los círculos.

Raquel Marco

Las 10 preguntas más frecuentes sobre la artrosis

Cuando padecemos una enfermedad nos entran las dudas. Son muchas las preguntas que se nos vienen a la cabeza y queremos respuesta a todas. Hoy, vamos a despejar las 10 preguntas más frecuentes sobre la artrosis. Lee con atención y toma nota

1.- ¿Qué es la artrosis?

La artrosis es la enfermedad reumática más frecuente. Se trata de una patología crónica que produce la degeneración del cartílago de las articulaciones.

2.- ¿Cuáles son sus síntomas?

Los principales síntomas es que comienzan a aparecer dolores en la articulación cuando ésta se mueve y puede inflamarse después de someterla a algunos esfuerzos. Posteriormente, a medida que la enfermedad vaya avanzando, puede acarrear una limitación de los movimientos de la articulación y cierta rigidez.

3.- ¿Cómo se diagnostica?

Se trata de un diagnóstico más o menos sencillo. El médico tendrá en cuenta el historial del paciente y si a él o a algún familiar directo le han diagnosticado otras  enfermedades reumáticas, algún traumatismo o lesión previa en las articulaciones. Además, realizará una exploración física en la que evaluará dónde se localiza el dolor, cómo es o su grado de severidad palpando la superficie de la articulación  para determinar cuáles son los puntos dolorosos y determinando el rango de movilidad y cuáles son los movimientos que producen el dolor.

El médico también realizará unas radiografías que permitirán confirmar si se trata de artrosis o no y cuál es su grado de gravedad.

4.- ¿Cuáles son las articulaciones a las que afecta en mayor medida?

Puede producirse en cualquier articulación, pero aparece de manera más frecuente en las zonas que más se sobrecargan como la columna, las rodillas, las manos o la cadera.

Articulaciones a las que afecta la artrosis

Articulaciones a las que afecta la artrosis

5.- ¿Qué tipo de tratamientos pueden seguirse?

La artrosis es una enfermedad crónica, por lo tanto, no existe ningún medicamento que consiga eliminarla. Sin embargo sí existen determinadas opciones que permiten paliar en cierta medida el dolor y la inflamación, aunque cada articulación necesitará de su propio tratamiento.

De manera general, los analgésicos permitirán paliar el dolor; los antiinflamatorios no esteroides facilitarán la no aparición de la inflamación, y los antiartrósicos sintomáticos de acción permiten la disminución de los dolores por períodos de tiempo más prolongados. En determinados casos también son recomendables las infiltraciones.

6.- ¿De qué otras maneras puede aliviarse el dolor?

En el caso de las artrosis de rodilla, cadera y columna es necesario mantener un peso corporal idóneo, mantener una buena higiene postural y dormir en un colchón adecuado. También es recomendable no andar sobre terrenos irregulares, en el caso de las mujeres evitar llevar tacones, realizar deportes como la natación o andar en bici y evitar aquellos en los que se produzca un mayor esfuerzo en las articulaciones lesionadas. Aplicar calor o frío en las zonas afectadas también contribuye a aliviar el dolor. En cuanto a la artrosis de mano, en casa hay que intentar utilizar utensilios adecuados que pesen poco y tengan un mango ancho.

7.- ¿Cuáles son sus causas?

Los viejos traumatismos en las articulaciones pueden generar, con el paso de los años, la aparición de la artrosis; tal es el caso de los esguinces graves. Otro factor de riesgo es la obesidad, ya que ese peso sobrecarga las articulaciones de manera directa. De la misma manera, la utilización periódica y repetitiva de determinadas articulaciones también potencia la aparición de la artrosis.

8.- ¿Existen diferentes tipos de artrosis?

Existen tres tipos de artrosis:

– La de tipo I es de causa genética. Se trata de un tipo de artrosis en la que existe una predisposición familiar.

– La de tipo II, que depende de las hormonas estrogénicas, es decir, que está relacionada con los niveles de estrógenos y, por lo tanto, afecta en mayor medida a las mujeres y se desarrolla mayoritariamente en los primeros años de la menopausia.

– La de tipo III, la relacionada con la edad y con los cambios musculoesqueléticos.

9.- ¿Cómo afecta esta enfermedad a la vida diaria?

Para evitar la aparición del dolor y hacer las actividades cotidianas un poco menos cuesta arriba, es recomendable seguir algunos consejos básicos como evitar llevar pesos de manera desequilibrada; no estirarse si se va a coger algo que está muy alto o se van a limpiar ventanas, intentar encontrar un medio que permita estar a la misma altura a la que pretendemos llegar; cuando se va a la compra, llevar un carro de cuatro ruedas y por delante; para coger las cosas del suelo, agacharse con la espalda recta, y cuando se están realizando tareas estáticas, evitar las posiciones fijas e ir cambiando el peso de una a otra pierna.

10.- ¿Es recomendable acudir a la cirugía?

Hay que empezar a tener cuenta esta alternativa cuando el resto de medidas no han tenido efecto y la artrosis que presenta el paciente está avanzada y es grave, es decir, cuando se ha perdido la capacidad de realizar las actividades del día a día y que el dolor sea tan constante e insoportable que no se pueda vivir con él.

Hay diferentes tipos de intervenciones: las que corrigen las lesiones y deformidades articulares, o aquellas en las que se requiere de la sustitución de la articulación por una prótesis. La cirugía permite, sobre todo, que mejore el dolor y se conserve la movilidad.

 Laura Alonso

Pau Gasol recibe infiltraciones de células madre en sus rodillas

Una tendinitis degenerativa en las dos rodillas lleva dando grandes quebraderos de cabeza a una de las figuras del baloncesto mundial y jugador de Los Ángeles Lakers, Pau Gasol. Es por ello que, recientemente, se ha sometido a la infiltración de células madre. Las células madre es uno de los últimos tratamientos pioneros en la regeneración de los tejidos en este tipo de enfermedades

La inyección de células madre es un tratamiento mínimamente invasivo para el paciente que consiste en extraer de las plaquetas de la sangre de cada persona determinados factores de regeneración de células que son los encargados de favorecer el desarrollo y la maduración de las células musculares lesionadas. Una técnica que no necesita del paso del paciente por el quirófano y que está obteniendo resultados muy satisfactorios.

En el caso de Pau Gasol las células madre que se le han inyectado en ambas rodillas proceden de su cadera. El proceso fue el siguiente: a través de una nueva técnica de ondas de ultrasonido, limpiaron y arrancaron el tejido muerto de los tendones de las rodillas del pívot español, concretamente el tejido cicatrizado de los tendones de ambas rótulas. Posteriormente, para facilitar su regeneración, le extrajeron las células madre de la parte posterior de la cadera y, después de someterlas al proceso de extracción para obtener las células regenerativas, éstas se le inyectaron en los tejidos buenos de los tendones de ambas articulaciones para que éstos se recuperen más rápidamente.

Pau Gasol se infiltra células madre en sus dos rodillas

Pau Gasol se infiltra células madre en sus dos rodillas

Ahora Pau Gasol está alejado de las canchas de baloncesto y ha anunciado que no estará en el Eurobasket 2013 de Eslovenia. Hay que darle tiempo a la recuperación de sus rodillas, tal y como declaró él mismo hace unas semanas: “esto tiene un proceso y un tiempo de reabsorción y de regeneración del tejido”.

Un tratamiento parecido de regeneración de tejidos lo llevó a cabo hace unos años el jugador del Futbol Club Barcelona, Xavi Hernández, a quien se le realizaron infiltraciones de plasma rico en factores de crecimiento.

Video Gasol explicando el tratamiento con células madre

Video Gasol explicando el tratamiento con células madre

Laura Alonso

Artritis Reumatoide. Causas, síntomas y diagnóstico

La artritis reumatoide es una enfermedad muy conocida. Pero seguro que hay algún despistado que aún no sabe cuáles son sus síntomas y tratamientos. En este post vamos a aclarar dudas acerca de qué es, por qué se produce, cómo se diagnostica y qué ocurre si la padeces

La artritis reumatoide es una enfermedad crónica y degenerativa que inflama la membrana sinovial de las articulaciones, encargada de alimentar, proteger y cubrir los cartílagos. Esta inflamación es muy dolorosa y provoca sensación de rigidez en la musculatura sobre todo por las mañanas. El resultado del hinchazón es huesos dañados y pequeñas erosiones.

Artritis reumatoide ataca a las articulaciones

La artritis reumatoide ataca a las articulaciones

No todas las articulaciones se ven afectadas de la misma manera. Las muñecas, los dedos de las manos y de los pies, los codos, los hombros, las caderas, las rodillas y los tobillos son los más sensibles a esta enfermedad que afecta principalmente a mujeres entre 40 y 45 años.

El por qué se produce la artritis reumatoide es todo un misterio. Todavía no hay evidencias que confirmen la implicación de agentes infecciosos como las bacterias o los virus. Algunos especialistas se atreven a afirmar que es de origen genético por la simple razón de que el propio sistema inmune es el que ataca a las articulaciones porque no las reconoce como propias. Otra de las causas podría ser ciertas proteínas hereditarias que se transmiten y hacen que las articulaciones se inflamen.

Saber si se padece o no esta enfermedad, no es complicado. La inflamación se puede apreciar a simple vista y es dolorosa. Además en ocasiones se puede producir el derrame del líquido sinovial. Otros síntomas son la deformidad debido al deterioro progresivo de las articulaciones afectadas y el abultamiento en las zonas de roce de la piel como codos o dedos.  La sequedad de la piel y las mucosas, la rigidez articular por las mañanas habitualmente, la fiebre, la dificultad para respirar y la inflamación de los vasos sanguíneos provocando úlceras son también síntomas de esta patología.

Diagnosticarlo al principio es complicado, puesto que los síntomas en el inicio no son muy claros. Esto es contradictorio, porque la verdad es que es muy importante que se diagnostique pronto. De ello depende la evolución de la artritis reumatoide.

Para frenar los avances de esta enfermedad existen dos tipos de fármacos: los que se utilizan para aliviar el dolor del día a día (antiinflamatorios y corticoides) y los que sirven para tratar la enfermedad a largo plazo. No todos son eficaces al 100% en todos los pacientes. Hay que encontrar cuál es el más eficaz y mejor tolerado por el enfermo.

Maje Navarro lucha contra la artritis reumatoide a diario

Maje Navarro lucha contra la artritis reumatoide a diario

Un ejemplo claro de que la artritis reumatoide no es el fin de ninguna etapa es el de la deportista María Jesús Navarro, Maje como le gusta que le llamen, a la que hace 20 años le diagnosticaron esta enfermedad. Maje, a pesar de los malos pronósticos de los médicos, supo sacar fuerzas para continuar con una de sus mayores alegrías, pasiones, el atletismo. Hoy, las dificultades de la enfermedad le acechan pero lucha para anteponerse al dolor y llevar una vida normal, dentro de los límites que produce la artritis reumatoide. Ahora solo piensa en sus nuevas metas deportivas, mientras cuida de su hijo a la vez que entrena y corre ultramaratones.

 

 

 

Raquel Marco